sin un simple ‘’hola’’, me levanté sabiendo que te necesitaba, fue extraño.
Entonces como una idiota salí de mi casa esperando verte esperando que
me mirases y me sonrieses me vestí pensando si te gustaría mi jersey
nuevo para luego comprobar que ni lo mirarías, te vi. Y tan solo logre
hacerme daño una vez más ya que ningún cruce de miradas existió tan
solo la timidez no apartaba una vez más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario