Busca el camino correcto.

He de reconocer que a veces me cuesta continuar. Que me digo, ya está, hasta aquí he llegado, paso de seguir intentándolo. Lo intento y fracaso, lo vuelvo a intentar y... fracaso. No puedo hacer nada más. Y me planteo rendirme y dejar de intentarlo. Siempre me digo que es mejor decir adiós que quedarse para nada. Luego lo pienso. Y me doy cuenta de que si quiero conseguirlo, que si quiero seguir confiando en mi misma, tengo que seguir adelante.Da igual las veces que fracase, no importa el esfuerzo que me cueste, ni si quiera el tiempo, porque el conseguirlo será recompensa, y por una vez me ayudará a darme cuenta de que si quiero, puedo. Nunca podré decir que no lucho por lo que quiero, que soy una orgullosa o que no tengo paciencia, últimamente no me reconozco, me estoy sorprendiendo a mí misma, no se si para bien, o para mal, pero es así, y punto.Porque sí, porque no importan las veces que te des la hostia, ya que si dejas de intentarlo, no conseguirás nada, o aún peor, te quedarás por el camino, y ese será el peor golpe de todos.